jueves, 12 de marzo de 2009

Nicolino volvió sin corona


El 10 de marzo de 1972, Locche caía en Panamá en su sexta defensa del título mundial de los welters juniors frente al boxeador local Alfonso Frazer. Perdió por puntos en 15 rounds y nunca más pudo recuperar el cetro del mejor del mundo.

Había terminado la pelea ese viernes 10 de marzo de 1972 bajo el sofocante calor de Panamá y el hombre estaba resignado. Su gesto era preocupante pero no estaba angustiado. Tenía ganas de hablar, de cenar y ya se había producido el encuentro con su esposa y su hijita Nancy. No estaba solo.

Hablaba de su ahogo: “Estoy acostumbrado a mantenerme dos kilos arriba de la categoría y bajarlos en los últimos dos días antes de la pelea. En Buenos Aires, no me afecta, pero aquí me mató”, decía el boxeador ídolo de los argentinos.

También contó:“Salí con todo y después me ahogué. Pensé que estaba cambiando el aire y me quedé tranquilo. Pero pasaban los rounds y cada vez andaba peor”.

Lo cierto es que las 15.000 personas que colmaron el Nuevo Gimnasio Panamá salieron gozosos por haber visto la coronación de un nuevo campeón de los welter juniors (súper ligero). El crédito local, Alfonso Peppermint Frazer, acababa de destronar a uno de los campeones que más deslumbraron en el boxeo mundial. Por eso su nombre está en el Salón Internacional de la Fama, junto a notables boxeadores.

Esa noche fue una de las más penosas presentaciones del hombre al que alguna vez lo produjeron como Chaplín para una cesión fotográfica, a ese hombre de 32 años al que lo llamaron mago, intocable, maestro y tantos otros calificativos por su boxeo de defensa magistral y de sus piñas, que parecían toques suaves y lastimaban.

Antes de viajar al corazón de Centroamérica el hombre había realizado cinco defensas (todas en el Luna Park de Buenos Aires) del título mundial ganado en Japón en 1968. 
Era Nicolino Locche, el boxeador de los gestos al ring side, el de los esquives, de los amagues y de tantos recursos, que ningún otro boxeador pudo aplicar con la misma astucia y calidad. Ese hombre perdió el título la única vez que salió de Argentina a defenderlo. Fue a Panamá en donde le pagaron 80 mil dólares (80 millones argentinos de esa época)ñ
Y perdió por puntos. Las tres tarjetas 149 a 146, 148 a 141 y 147 a 143 favorecieron al local, incluso la del juez argentino Luis Allende.

Robinson, como firmaba con seudónimo Ernesto Cherquis Bialo, en El Gráfico, reconoció que el fallo fue justo y que después del 7º round la pelea “fue un suplicio para Locche. Permaneció en el ring por vergüenza”.

En el tercer round se produjo los mejor de Nicolino cuando atacó y desbordó al rival y Frazer recibió todo lo que le tiraba el argentino. Pero ese trabajo no tuvo continuidad porque a Locche le faltó aire y además porque Frazer realizó una pelea muy estudiada por su técnico estadounidense Ray Arciel. Y le salió bien.

Ese periodista ya lo había advertido, semanas antes, que si Locche no tenía el estado físico adecuado perdería el título mundial.

Nicolino no pudo recuperar el título. Esa noche de Panamá fue la más dura.

Es historia

80 mil dólares

Una buena bolsa 
Esa cantidad de dólares representó la más suculenta que recibió Locche y para ganar esa cifra en nuestro país, debía realizar “dos defensas y media”, dijo el promotor Tito Lectoure. Además le pagaron los pasajes, alojamiento y todos los gastos.


Peppermint

Frazer, un corto reinado
El panameño, tras conseguir el título mundial ante Locche, el 10 de marzo de 1972, no lo pudo mantener porque en la primera defensa, perdió ante el colombiano Antonio Cervantes el 28/10/72 por nocaut

La revancha

No pudo ser ante Frazer
Como el panameño perdió el título, a Nicolino le dieron otra oportunidad para recuperarlo ante Antonio Cervantes (le había ganado en el Luna Park en el ’71), pero el colombiano lo venció por nocaut técnico el 17/3/73 en Maracay, Venezuela.


A lo Nicolino

Sus frases antes de pelear
“A esta altura de mi carrera necesito demostrarme que puedo ser campeón en mi país y en cualquier lado”, ”Estoy bien preparado y sin problemas físicos”, “No le tengo miedo a Panamá, su clima, su gente y su fallos. Van a aplaudirme”

Con la familia

Nicolino estuvo con su esposa
Ana María, la primera mujer de Nicolino (después se casó con María Rosa), estuvo en Panamá con su hija Nancy (el otro hijo es Nicolino Felipe) y fue agasajada por Miss Panamá, que le entregó un ramo de flores. 

66 años tenía Nicolino Locche cuando murió en Mendoza, el 7 de setiembre de 2005. Había nacido en Tunuyán, el 2 de setiembre de 1939.

No hay comentarios: